Hoy el post os lo dedico a vosotros en especial a TI
Feli, hemos pasado muchos años juntos aunque sentí que ese día sería muy diferente, sería uno de los días más importantes de tu vida y tuve la suerte de que me eligieseis para coordinar este día tan especial, gracias. Durante la niñez fuiste mi compañero incansable de juegos y peleas, siempre estabas para todo. Fuimos chefs profesionales, experimentando con todo lo que estaba en la cocina, fuimos exploradores, fuimos historiadores y también nos convertimos en escritores de una de las mejores historias: la nuestra.
Aunque tenemos muchas diferencias, de un modo u otro siempre estuvimos unidos. a lo largo de los años me di cuenta y aprendí que ser hermanos es mucho más que compartir un lazo sanguíneo y un ADN parecido: significa decidir ser inseparables, apoyarnos en las buenas y en las malas y confiar en el que el otro siempre estará ahí para nosotros.
Los años han pasado y nuestra relación ha evolucionado con nosotros. La dura etapa de la adolescencia, la fase universitaria y la actual con la que seguiremos creciendo en familia .
Gracias por haber compartido todos estos años conmigo y por todo lo que eso ha significado, por sentirte orgulloso de hasta el más mínimo de mis logros y porque nunca dejas de confiar en que lograre hacer todo lo que me proponga, aunque me cueste ponerme.
Los años han pasado y puede que ya no sea esa pequeña niña tan indecisa que chinchaba sin parar, pero en esta ocasión lo que si tengo claro es algo, es que si quiero simplemente envejecer junto a los nuestros y volver a cocinar locos experimentos, aunque esta vez sea con pelo blanco.
Os deseo lo mejor chicos, que seas muy felices.
Espero que os gusten las fotos, así es como mejor os puedo enseñar uno de los días más mágicos de una de las páginas del libro de mi vida.
Catering: Alabandero
Fotografía: Pedro Jaén
